¿Sufres o has sufrido competencia desleal? Tranquil@, no eres ni serás el últim@ ni el únic@. La competencia desleal es una práctica frecuente entre empresas, pero no entre todas las empresas sino entre aquellas que tienen entre sus principales objetivos el de acabar con la competencia a toda costa. Es decir, acudiendo, incluso, a la mala praxis. Entre estos «malos modos» empresariales, los casos de competencia desleal más habituales son los que os vamos a detallar a continuación y que veréis explicados en nuestro vídeo de la semana.

Aunque son numerosos, los más conocidos son la venta realizada a bajo coste, la inducción a la infracción del contrato laboral, la imitación parasitaria, la competencia adquirida mediante la infracción de leyes y la denigración y comparación.

  • Venta a bajo coste, muy por debajo del precio.- Es el más famoso porque es el más sencillo de llevar a cabo y tiene consecuencias inmediatas, tanto en las empresas como en el mercado. Internacionalmente se conoce a esta práctica como «Dumping» y consiste en vender un producto a mucho menos coste del precio normal, en muchos casos es tan agresivo que se vende el servicio o artículo por menos de lo que supone el coste de producirlo. El objetivo final: eliminar a la competencia que no puede resistir esas pérdidas y quedarse con el mercado. La Organización Mundial de Comercio señala que el Dumping es condenable, sobre todo cuando puede suponer un problema grama en un sector productivo importante para un país.
  • Inducción a la infracción del contrato laboral.- Está tipificado en el Artículo 14 de la Ley de Competencia Desleal y puede darse con diferentes versiones: puede ser que nuestra competencia influya en uno o varios de nuestros trabajadores para que infrinja los deberes que está obligado a cumplir por contrato -como, por ejemplo, el pluriempleo y las incompatibilidades-; puede que la competencia se centre en tratar de hacer que nuestros empleados rescindan su contrato. En este caso, inducir a alguien a rescindir su contrato ofreciéndole mejoras no es competencia desleal, sí lo es si para inducirlo se recurre al engaño o si se hace solo para atrapar al trabajador y hacer que dé información confidencial de su anterior empleo.
  • Imitación parasitaria.- Es más frecuente de lo que puede parecer y son muchas las empresas de distintos sectores que recurren a esta fórmula que consiste en sacar provecho de la reputación de un competidor creando confusión en el consumidor mediante la imitación de sus acciones.
  • Competencia mediante infracción de leyes, denigración y comparación.- Un competidor desleal es aquel que se dedica a destacar y difundir sobre nuestra empresa informaciones negativas que son falsas, hundiendo nuestra reputación para favorecer la suya. También lo es el que compara sus servicios o productos con el nuestro sin ser iguales pero queriendo poner de relieve carencias por nuestra parte que no tienen sustentación. Y, por puesto, es competencia desleal aquel que infringe una norma o ley para desbancarnos del mercado.

Si consideras que eres víctima de alguna de estas prácticas de competencia desleal, recuerda que puedes ponerte en contacto con nuestro equipo de inteligencia y expertos en seguridad. En Detectib ponemos a tu disposición un teléfono de atención gratuito (900 600 200) y nuestro correo electrónico (info@detectib.com). No dudes pedir ayuda: estas situaciones pueden llevar a un negocio a fracasar en cuestión de muy poco tiempo y conviene tomar las medidas necesarias tanto para prevenirlo como para paliarlo.

Casos competencia desleal