La crisis y la reforma laboral abrieron la veda a que numerosas empresas españolas hayan llevado a cabo reestructuraciones de plantillas en las que miles de trabajadores han sido despedidos en los últimos años. Un desgraciado panorama en el que, lamentablemente, no todo ha sido trigo limpio.
Y es que aunque probablemente en la mayor parte de los casos se trata de empresas que realmente no pueden dar continuidad a su actividad con la misma cantidad de trabajadores, también han sido muchas las que se han aprovechado de las circunstancias para realizar despidos injustos.
Los trabajadores no siempre conocen sus derechos y ello contribuye también a que dichas empresas se salgan con la suya sin atender sus obligaciones como empleadoras. Ante estas situaciones de indefensión, lo recomendable es que los trabajadores acudan a expertos legales que les asesoren respecto a su caso y sus derechos, así como a detectives privados laborales que obtengan pruebas de la situación real.
Algunas empresas realizan un reajuste de personal alegando causas económicas al considerar que el despido de uno o varios de sus trabajadores pueden ayudarle a superar una situación económica negativa. No obstante, se han dado casos de empresas que han llevado a cabo despidos por estas razones y después han contratado a otra persona para cubrir el mismo puesto, lo cual no resulta comprensible si realmente el despido ha sido por esa causa.
En un caso así, el ex trabajador podría demandar a la empresa por haber sido despedido de manera injusta y para apoyar sus argumentos puede contratar a un detective especializado en investigaciones laborales que obtenga pruebas de que se ha contratado a otra persona para realizar el mismo trabajo que antes desempeñaba él.
También puede ser que una empresa alegue causas técnicas, organizativas o de producción para llevar a cabo algún despido o recolocación de personal si considera que una reestructuración de los recursos puede contribuir a la viabilidad de la misma. Ahora bien, ello debe deberse a criterios objetivos y no ser utilizado como otra manera de realizar despidos improcedentes o, incluso, de hacer mobbing a un trabajador para conseguir que sea él mismo el que abandone la empresa sin derecho a percibir el dinero que habría que darle al despedirle.
Nuestra recomendación es que ante una situación que considere injusta se ponga en manos de expertos legales o de detectives privados profesionales para que le asesoren respecto a su situación y le expliquen sus derechos. Equipo de comunicación Agencia detectib