Estamos acostumbrados a ver en los medios de comunicación noticias sobre toda clase de delitos económicos y casos de corrupción, a todos los niveles. Pero cuando llegan tiempos de dificultades económicas, la picaresca delictiva crece de manera exponencial. Destaparla no siempre es sencillo, se necesita una ardua labor de investigación para dar certeza a las sospechas.
Los delincuentes no dudan en emplear sofisticadas herramientas tecnológicas para conseguir su objetivo, obtener dinero de forma fraudulenta o desviar fondos a paraísos fiscales. A ello hay que unir que la investigación de delitos económicos requiere de unos conocimientos profundos en materia legal y fiscal. Y una complicación añadida es la variedad de actuaciones consideradas como delictivas.
Los delitos económicos pueden ir desde un fraude de empresas a aseguradoras a la apropiación indebida de activos. Desde modificaciones contables a casos de corrupción y sobornos para obtener un beneficio ilícito. O desde insolvencias fingidas a alzamientos de bienes para evitar saldar deudas adquiridas.
La investigación de delitos económicos, por tanto, requiere de profesionales multidisciplinares que tengan una formación adecuada, pero que también sepan cómo desenvolverse en un entorno que puede llegar a ser realmente hostil. En Detectib contamos con esos profesionales, capaces de hacer una labor impecable incluso en las circunstancias más delicadas, como son los casos de corrupción.
¿Cómo se actúa en la investigación de delitos económicos?
Conseguir pruebas en la investigación de delitos económicos puede llevar tiempo, pero son los detectives especializados quienes mejor están preparados para ello. Pueden investigar con la gran eficiencia desde dentro de la propia empresa cuando hay sospecha de fraude o corrupción de algún empleado. Y también pueden hacerlo si la sospecha recae sobre los responsables de la compañía o la denuncia llega desde fuera de ella.
La gravedad de esos delitos económicos o el resultado de la corrupción pueden ser devastadores. En empresas e instituciones, demostrar una actividad delictiva de esta índole provocan siempre una pérdida de prestigio y de confianza irrecuperables. Y, cuando lo que se ha buscado es el beneficio de la empresa de manera ilícita, las penas económicas y de cárcel pueden acabar provocando su desaparición.
La labor del detective en cualquiera de los casos requiere de la máxima discreción y absoluta confidencialidad. Es necesario revisar contabilidades y rastrear el recorrido del dinero cuando no esté clara su procedencia o su destino. También se deben analizar incrementos patrimoniales de sospechosos y, en ocasiones, incluso su posible relación con organizaciones criminales.
Dando incluso un paso más allá, el detective también debe analizar con detenimiento relaciones comerciales de dudosa legalidad o posibles actividades encubiertas que puedan llevar a confirmar y probar esos casos de corrupción. Y para ello no basta con técnicas de seguimiento, rastreo o escucha. En ocasiones es necesario recurrir a herramientas informáticas sofisticadas e incluso a analizar perfiles psicológicos.
Por supuesto, cada paso de la investigación de delitos económicos se debe dar con extraordinario sigilo, moviéndose en un delicado equilibrio. Un pequeño paso en falso y toda la trama podría disolverse antes de poder conseguir las pruebas imprescindibles para iniciar un procedimiento judicial.
No hay que olvidar que, ante un tribunal, las pruebas obtenidas en la investigación de delitos económicos serán válidas y admitidas. Para ello, simplemente, se deben haber obtenido conforme a la ley y el investigador ha de estar debidamente acreditado para desarrollar su labor.
En Detectib ponemos a tu disposición a un magnífico equipo de profesionales, especializados en casos muy diferentes. Todos cuentan con la formación más amplia para realizar las pesquisas necesarias, ya sea en una investigación de delitos económicos o de cualquier otro tipo. Ante cualquier sospecha, no dudes en acudir a nosotros y pedir más información.