El acoso laboral es un real que muchas personas en España padecen. No obstante, hasta hace algunos años era una especie de tabú para la sociedad. No todos hablaban de ello y mucho menos hacían algo para detener la situación. Pero, incluso en Detectib hemos ayudado a muchas personas a investigar casos de posibles acosos en el trabajo; y hoy te diremos cuáles son las típicas señales que determinan que lo estás experimentando.
Tipos y niveles de acoso laboral
Conoce los tipos de acoso laboral con Detectib. Existe el acoso laboral horizontal, vertical descendente y vertical ascendente. El primero se refiere a que los victimarios son los propios compañeros de trabajo, aquellos que se encuentran en el mismo nivel en la jerarquía. El segundo incluye a tus superiores, sean tus jefes directos o no. El último tipo de acoso laboral no es tan común, ya que se refiere al sufrido por trabajadores a su jefe.
En el caso de los niveles de acoso laboral, existen 3: leve, medio y grave. El acoso laboral leve incluye cualquier tipo de improperios verbales. El acoso laboral medio no es verbal, ni físico, sino con miradas, cartas, emails, muecas, etc. Por último, el acoso grave incluye todas las anteriores, es verbal, no verbal y física. Este nivel incluye todo tipo de violencia física.
Señales de que estás padeciendo acoso laboral
En ocasiones, no sabemos que existe un término que describe alguna situación que estemos viviendo, y menos que hay una serie de leyes que respaldan a la víctima. El acoso laboral o mobbing es uno de ellos, ya que lo podemos interpretar como una simple circunstancia incómoda, pero va mas allá. Es un trato verdaderamente hostil y regular que causa problemas psicológicos y afecta la faceta profesional de las personas.
Asignación de trabajos por debajo de tu capacidad
Una de las primeras señales que puedes detectar es que no eres valorado según tus capacidades. El acosador laboral asigna tareas que están muy por debajo de lo que en realidad puedes hacer o por lo que fuiste contratado. Esta es una forma de menospreciar al trabajador en la que poco a poco sienta que su trabajo no es importante. Cuando esta situación es constante, es una señal de acoso laboral.
Ridiculizar
Tanto compañeros como jefes pueden sentirse en el derecho de ridiculizar a otra persona si comete un error, por su forma de vestir o actuar. Esta es una de las formas de acoso laboral común asociada con el bullying. Sobre todo de personas en una posición jerárquica superior, suelen usar la ridiculización como una forma, según ellos, de dar lecciones. A veces sucede, aunque realmente no exista un error por parte de la víctima.
Trabajo excesivo o sobre las capacidades
Así como es posible que se asignen tareas mínimas, que no hagan destacar el talento o no estén en la lista de trabajos que debes realizar; también está el caso de que intenten designar una cantidad de trabajo exagerada para una sola persona, así como por sobre sus capacidades o competencias. Por lo general el estrés y ansiedad invadirá a los trabajadores que se enfrenten a esta situación.
Ser amenazado dentro y fuera de la empresa
Las amenazas en el trabajo, sobre temas personales y laborales, son unas de la señal más graves. Algunos trabajadores reciben llamadas, mensajes, correos o todos los anteriores, dentro o fuera del horario de trabajo, como señal clara de intimidación; y en muchos casos con amenazas de despido injustificado. Las personas viven en una constante presión y sienten que el trabajo ha invadido todos los ámbitos de su vida.
Criticas constantes
¿Crees que tus compañeros o superiores no dejan de criticarte sin razón? Entonces puedes estar sufriendo acoso laboral. La crítica puede ser buena para mejorar, pero no cuando no hay razones para recibir constantes opiniones que afectan, incluso, tu autoestima. Es una forma de someter a los demás a una constante evaluación que no tiene otro fin que desestimar sus capacidades.
¿Necesitas un detective?
El acoso laboral es uno de los casos más comunes para los especialistas de Detectib. Este tipo de acoso puede concatenarse con otras formas de violencia, como la de género, discriminación y otros conceptos negativos. Un detective puede ayudarte a recopilar pruebas que te servirán si decides denunciar el caso. Es importante que un profesional evalúe que puede ser una prueba y que no, además de otros asuntos relevantes.
Mientras toma datos y reúne las pruebas, el detective puede asesorarte para no agravar el caso y salir airoso. Aunque nunca se sabe cuál será el próximo paso de un acosador, el detective puede ayudarte a aplicar técnicas de defensa; o incluso para que el acoso sea visto como un problema del acosador, y no que hay algo malo en ti. De modo que este profesional puede ser doblemente útil si sufres acoso en tu trabajo.